¿Qué son las palabras clave? Potencia tu SEO

En el mundo online, el SEO (search engine optimization) es un concepto clave para que un sitio web o e-commerce aparezca dentro de los primeros lugares en los motores de búsqueda. La premisa es simple: mientras más arriba estés, más probable es que los usuarios te encuentren, pero para esto es importante conocer que es una palabra clave.

¿Qué significan las palabras claves para el SEO?

Las palabras claves (o keywords, en inglés) resultan fundamentales en nuestro sitio web. Son aquellas que permiten que, cuando los usuarios realizan una búsqueda en Google, lleguen hasta nosotros y encuentren la respuesta a sus preguntas. El objetivo: lograr presencia destacada para que, cuando los clientes potenciales busquen algún concepto relacionado con nuestro negocio, sea este uno de los primeros que visualicen… De modo que eso se transforme en visitas.

Tipos de palabras clave

Existen varios tipos de palabras clave que podemos utilizar para potenciar nuestro sitio web o negocio online. Imagina que estás buscando el mejor lugar para probar comida italiana en tu ciudad y no tienes idea por dónde empezar. Puedes abrir un buscador y teclear «comida italiana», o puedes ir un poco más allá y escribir «comida italiana + tu ciudad». También tienes la posibilidad de ser mucho más específico y preguntar abiertamente «dónde comprar la mejor comida italiana en XXXX».

En el mundo SEO, las búsquedas que están compuestas por una única palabra son conocidas como palabras clave genéricas o head keywords. El segundo caso corresponde a las medium keywords, donde son dos o tres palabras las que generan búsquedas. El último caso son las long tail keywords, las recomendadas por la comunidad SEO porque son las que más pueden aproximarse a lo que busca un usuario.

Existe otra clasificación para las palabras claves que utiliza un usuario en sus búsquedas online que tiene que ver con la intención que hay detrás. Se trata de las siguientes.

• Keywords informativas. Aquí las personas quieren resolver dudas concretas. Por ejemplo: “qué es SEO”, “quién inventó el SEO”, “cómo utilizar el SEO”, etcétera.
• Términos transaccionales. El cliente conoce la acción que realizará y busca en Google un sitio para poder concretarlo. Algunos ejemplos son: “dónde invertir”, “dónde comprar comida italiana”, “lugares para viajar en verano” y similares. Esta intención es clave para posicionar nuestra web si ofrecemos un servicio o tenemos un negocio, ya que podemos enlazar estratégicamente nuestra oferta con la demanda de las personas.
• Palabras claves navegacionales o de sitio web. El usuario busca en Google un sitio web concreto que ya conoce de antemano.
• Palabra clave de geolocalización. Este tipo de búsqueda ocurre cuando, además del concepto principal, necesitamos lugares que se encuentren cercanos a nuestra ubicación actual o a otras que visitaremos en un futuro.
• Palabras clave de marca o branded. Se usan cuando la persona necesita información sobre una determinada marca o empresa para complementar lo que ya sabe.
• Palabras clave negativas. Un concepto a evitar, donde una marca no quiere posicionarse al ser perjudicial para el negocio. Por ejemplo: “restaurantes con la peor atención”, “empresas con poca experiencia”, etcétera.

¿Cómo es la búsqueda de palabras clave?

El paso siguiente para contar con una buena estrategia de SEO es identificar cuáles son los conceptos clave asociados a nuestro sitio web o negocio. No importa si eres un restaurante, una plataforma de inversiones o una escuela de idiomas online: cada rubro tiene una serie de conceptos asociados que, si logras identificar, podrás usar a tu favor para posicionar tu negocio en internet y así atraer a nuevos clientes.

Para identificar esas palabras clave, debemos realizar una keyword research o estudio de palabras clave. Se trata de una investigación de mercado que nos permitirá detectar las palabras relevantes que han de incluirse en el contenido de nuestra web para obtener mayor y mejor tráfico. Las keywords principales no son las mismas para cada negocio, y por eso debemos estudiar cada una de forma exhaustiva.

Actualmente existen diversos sitios especializados que te permiten llevar a cabo esta investigación. Ellos te darán información sobre los conceptos más populares en la web, los más posicionados por la competencia y los volúmenes de búsqueda de esas palabras.

Algunos de estos sitios son de pago, y entre ellos podemos encontrar propuestas como las de Keyword Tool, Sistrix, Mangools, SemRush, Google Adwords o Ahrefs. También existen algunos gratuitos, que pueden ser un buen punto de partida para nuestro propósito. Aquí destacamos Google Trends (para analizar tendencias), Ubersuggest y Answer The Public.

¿Cuántas palabras clave usar y dónde utilizarlas?

La respuesta a estas preguntas es simple: en todo el contenido de nuestro sitio web. Usaremos las palabras clave en los títulos y subtítulos, en los párrafos que describen nuestra oferta y propuesta de valor, en los pies de foto, en las URL, en los metatítulos y en las metadescripciones. No importa el tamaño o ubicación de este contenido, ya que la suma de cada pequeña acción que realicemos en nuestro sitio web tendrá un impacto positivo en su optimización.

Te recomendamos balancear las palabras clave con el flujo de lectura. Por más que queramos posicionar nuestro sitio, no lo lograremos si repetimos el mismo concepto varias veces e impedimos una lectura correcta del texto. Piensa en ti como usuario: ¿confiarías en un sitio web que repite más de 15 veces que ofrece la mejor comida italiana? Puedes decir lo mismo de otra manera y apoyar tu relato con descripciones, imágenes de calidad y conceptos asociados a la búsqueda principal. Además, muchos buscadores han introducido sistemas que penalizan esa práctica.

Para posicionar una web es muy importante considerar la extensión, la ubicación (lugar donde se coloca la palabra clave), la semántica y el uso de palabras clave relacionadas. Por ejemplo, si vas a hablar de comida italiana no puedes dejar de mencionar conceptos como “canelones”, “queso”, “tomate”, “albahaca” y demás.

Recuerda siempre que el éxito de tu negocio, además de la gestión misma, dependerá de lo bien que logres posicionarte frente a la competencia y de la estrategia que utilices para estructurar y potenciar el contenido que ofreces. Calidad, diferenciación, enfoque y claridad son fundamentales, y solo estos factores combinados podrán ayudarnos a redirigir el tráfico que queremos conseguir entre la ilimitada oferta de Internet.