Toda empresa con presencia web debería saber, al menos, lo básico de SEO para principiantes. Mediante un posicionamiento orgánico exitoso, podrás aparecer en los primeros lugares de los buscadores y generar más tráfico hacia tu página. ¿Sabes cómo empezar?
A continuación, te vamos a mostrar una serie de consejos para que puedas comenzar a aumentar las visitas y obtener conversiones más efectivas. ¡Manos a la obra!
Las palabras clave, tanto primarias como secundarias, son fundamentales a la hora de crear contenido para tu sitio web. No importa si escribes blog posts, guías, reviews, críticas o cualquier otra clase de contenido, debes usarlas durante todo el texto en una buena densidad. Para averiguar cuáles son las palabras clave de tu rubro, puedes usar Google Keyword Planner, una herramienta gratis para estos fines.
La URL de tu página web debe ser corta y directa, para que los usuarios puedan recordarla y compartirla con facilidad. Intenta que el nombre del dominio describa qué es lo hace tu empresa, o dónde puede encontrársele. Incluso es recomendable incluir una palabra clave primaria, aunque no es fundamental.
Una estrategia de backlinks es fundamental para generar más tráfico. Se trata de que sitios reconocidos publiquen contenido que contengan links que redirigen hacia el tuyo. De esta forma, los lectores sabrán que tu información es fidedigna y profesional.
Los fragmentos destacados son las respuestas que aparecen en la parte superior de la página cuando haces una búsqueda. Estos fragmentos están encerrados en un cuadrado y resaltan la información. Posicionarse en este sector aumenta el tráfico considerablemente.
Los motores de búsqueda posicionan mejor el contenido que es más legible o que cumple ciertas condiciones. Por ejemplo, es importante evitar el wall of text, o muro de texto. Además, utilizar bullet points, imágenes o particionar el contenido ayuda bastante a que Google considere tu contenido como más agradable.
Los llamados meta tag y metadescripciones son fundamentales al crear contenido. Estos son lo primero que un buscador ve cuando se topa de lleno con tu página web. El primero define el título del contenido y el segundo de qué trata ese contenido. Si son directos y concisos, el usuario no dudará en dar clic.
La performance de tu sitio web debe ser la mejor posible. Los visitantes no tienen paciencia cuando se trata de sitios que no cargan nunca. Eliminar todo lo que sobra y que hace que tu página se vuelva lenta es importante para que los usuarios accedan fácilmente a tu información. Además, te aseguras de que en celulares también se cargue rápidamente.
Una estructura interna de enlaces, a la vez que otra que conduzca fuera de tu sitio, puede convertir a tu sitio web una telaraña de información. Gracias a esto, te aseguras de que los lectores deriven a diferentes páginas, hasta llevarlos a la landing page, donde puedes ofrecerles algún producto.
Si vas a utilizar gráficos o cualquier otra data sacada de la web, entonces es importante que incorpores enlaces que conduzcan a la fuente. De esta forma los usuarios verán que la información es real y confiable.
Las estadísticas muestran que el contenido que tiene más de 300 palabras se posiciona mejor que aquellos que tienen menos. Nosotros te aconsejamos que subas de las 1000. Google lo considerará como mejor contenido. De todas formas, no llenes tu texto de información basura solo para sobrepasar este límite.
Google penaliza el contenido copiado de otras fuentes, incluso no posicionado tu página en absoluto. Si sacas información de otra fuente, asegúrate de hacer un copywriting correcto, es decir, parafrasear la información y adecuarla a tu propio lenguaje y estilo.
Mantener actualizado tu contenido es fundamental para que los lectores sientan que están tratando con un profesional que está al día con la información. Analiza tus publicaciones pasadas y actualízalas de vez en cuando. Si vas a publicar algo nuevo, que sea contenido actual.
Revisar el contenido de tu sitio es uno de los trabajos más engorrosos que hay, pero tienes que hacerlo. Revisa tus publicaciones, si cuentan con las palabras clave fundamentales para el tema, como el formato del sitio y de los textos, y si las páginas están posicionando bien. Puedes hacerlo por ti mismo, pero te recomendamos que lo haga un profesional por ti.
El On-Page SEO, es decir, las técnicas de SEO al interior de tu sitio, pueden ser varias y variadas. Para que no olvides ninguna, es fundamental que hagas una lista y las corrobores una por una. Algunos ejemplos son:
Por último, pero no menos importante, analiza a tu competencia directa, es decir, del mismo rubro, localidad, productos, etcétera. Para esto puedes utilizar plataformas gratuitas como SEMRUSH o Similarweb. Podrás ver su cantidad de visitas, así como las palabras clave que utilizan, tanto en su contenido como en sus Ads.
Con esta información en tu poder podrás adecuarte o adelantarte a ellos, haciendo que muchos de sus potenciales clientes acudan antes a tu sitio. Es una estrategia interesante, aunque requiere bastante investigación.
Esperamos que con esta lista de consejos puedas generar más tráfico web hacia tu página. El SEO para principiantes no es complicado, solo es cosa de tener en consideración cada uno de sus aspectos y desarrollarlos en profundidad. Siempre puedes buscar la ayuda de un profesional que te dé algunos tips. ¡Con esta información en tu poder no hay forma de que no alcances los primeros lugares en los buscadores!